Mallorca es la más grande de las Islas Baleares y como tal, la que más cosas nos puede ofrecer, desde la sierra de la Tramontana en la que se pueden hacer rutas muy chulas, hasta las Calas de Mallorca donde te espera el paraíso. Hemos hecho unas bonitas navegadas alrededor de esta gran isla, la última vez nos pasamos un mes navegando por sus aguas, esas aguas cristalinas y esos arenales vacíos ya en el mes de noviembre pero que invitan a darte los últimos baños del año, con temperaturas aún bastante agradables tanto para bañarse como para tomar el sol.
Otra de las cosas que nos sorprendió gratamente fue su gastronomía, esos platos que no te esperas y de los que no has oído hablar en tu vida pero que cuando te los ponen delante te los comes ya con los ojos.
Palma, la ciudad que te atrapa, nada más bajar del barco frente al puerto ya encontramos su maravillosa Catedral y el Palacio de la Almudaina o los Baños Árabes y como no, el Palacio de Marivent, podríamos pasar una semana en esta ciudad y no tendríamos tiempo de ver todo lo que nos gustaría.
El norte de Mallorca, desde Antdratx al cabo de Formentor, al igual que en Ibiza, la cara norte es la menos maltratada por el ladrillo, aunque hay miles de casas escondidas tras la frondosa vegetación, cuando navegas, aún puedes ver más bosque que casas. Aquí destacaremos como preciosa y por lo tanto muy turística la bahía de Sóller, junto al paseo hay un tren de madera que nos acercará a su bonito pueblo donde pasear por sus calles es una auténtica delicia.
Ya en la cara este de la isla podemos llegar a Alcudia y Pollensa, dos grandes bahías muy concurridas por su atractivo turístico pero donde realmente queremos llegar es a las Calas de Mallorca, esta zona es aún virgen y sus aguas transparentes te invitan a bucear cerca de las rocas donde se puede ver la diversidad de la fauna subacuática y si quieres hacer un bautizo de buceo o una inmersión también hay multitud de centros de buceo que nos ofrecen salidas de este tipo.
Por último navegaremos hacia la cara sur de la isla y antes de cruzar a Cabrera haremos una parada en La Colonia de Sant Jordi a comer un arroz en alguno de sus múltiples restaurantes, nos bañaremos en Es Trenc y pasearemos por su larga playa de arena fina.
Unas inolvidables vacaciones por las Islas Baleares, navegar por Mallorca, recorrer Ibiza y Formentera en velero y descubrir Menorca a bordo de un barco es el plan perfecto para el próximo verano.